Un juez de control de garantías envió a prisión a cumplir medida de aseguramiento a Cesar Córdoba, presunto responsable de asesinar a su excompañera sentimental, el pasado 1 de mayo, en el corregimiento El Pato, zona rural de Zaragoza, Bajo Cauca antioqueño, un hecho que en su momento causó conmoción en el departamento y que aún sigue generando repudio.
De acuerdo con la investigación adelantada por la Fiscalía, el procesado, de 58 años, habría tenido una discusión con Ledys María Arrieta Tapias y presuntamente la agredió con un arma cortopunzante hasta asesinarla.
Posteriormente, al parecer, el presunto victimario tomó el cuerpo de la mujer y lo sepultó en una mina abandonada que está ubicada cerca de la vivienda donde residía, donde luego fue hallado por las autoridades. Asimismo, trascendió que el presunto feminicidio se cometió en presencia de un niño de 2 años, nieto de ambos.
En su momento se conoció que Ledys María, de 53 años, había llegado el 29 de abril pasado a Zaragoza desde Caucasia, donde estaba residiendo, porque presuntamente le iba a entregar un mercado al hombre que después la habría asesinado.
A pocos metros de la vivienda de Cesar Córdoba, las autoridades encontraron un costal, el cual al abrirlo hallaron el cadáver de Ledys María Arrieta Tapias. El cuerpo fue desembrado en varias partes.
La víctima de este hecho también era madre de cinco hijos que tuvo con el ahora procesado y el crimen fue rechazado por la comunidad y las autoridades.
Tras huir de la zona donde habría cometido el crimen, el hombre fue capturado en el municipio de San Marcos, en el departamento de Sucre, y puesto a disposición de las autoridades competentes para su judicialización. En las primeras audiencias no aceptó los cargos imputados por la Fiscalía por el delito de feminicidio agravado.
Recuerde que cualquier hecho de violencia contra las mujeres en Antioquia puede ser denunciado en la Línea 123 Mujer o en la línea nacional 155. Pero también se puede acudir a cualquier autoridad de los municipios. Los expertos reiteran que ante señales de violencia o agresiones se debe estar alerta, pues estas van escalando y pueden terminar en un feminicidio. Reportar de forma anónima cuando una mujer familiar o conocida está en riesgo también se puede hacer.