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El Eln atacó siete municipios de Norte de Santander el fin de semana

Esta guerrilla provocó momentos de miedo, incertidumbre y zozobra en siete municipios de Norte de Santander.

La noche de este lunes festivo, el miedo y la desesperación se apoderó de la comunidad en Chinácota, tras el ataque de sujetos en moto a la Estacion de Policía.

Siendo las 7:40 de la noche, se presentó un hostigamiento con disparos y el lanzamiento de una granada contra las instalaciones policiales e este municipio, dejando heridos a dos soldados y un civil, que se encontraban en las inmediaciones del lugar.  

Las autoridades informaron que, ante el hecho, se redobló la vigilancia y el control en el casco urbano con apoyo de la Policía nacional y del ejército nacional.

Viviendas y zonas comerciales vecinas resultaron afectadas a nivel de infraestructura, por la onda explosiva.

De igual forma, se conoció que los disparos  fueron propinados desde el mirador de la Virgen de la Paz, en la vía que comunica a Chinácota con Ragonvalía.

Los altos mandos militares y policiales investigan lo ocurrido, para determinar cuál grupo armado ilegal está detrás del ataque, aunque los indicios apuntan al Ejército de Liberación Nacional (Eln), guerrilla que el fin de semana perpetró diferentes acciones terroristas en el departamento, en el marco de su aniversario 57.

El Eln sigue demostrando que hoy es el grupo armado ilegal con más poder en Norte de Santander. Ayer, en su aniversario 57, volvió a dejar su huella plasmada en diferentes puntos del departamento. Toledo, San Bernardo de Bata, Tibú, Santiago, Teorama, Hacarí y Puerto Santander fueron algunos de los sitios donde esta guerrilla provocó momentos de miedo, incertidumbre y zozobra, al poner banderas, dejar calcomanías y mensajes, instalar aparentes artefactos explosivos y activar una caja bomba.

Falso cilindro bomba

El domingo, en el barrio Beltrania de Puerto Santander se vivieron varias horas de tensión y todo por cuenta de un supuesto cilindro bomba que dejaron debajo de un pasacalle, donde el Eln enviaba un mensaje que aseguraba que siguen en pie de lucha.

Algunas personas dijeron que antes de las 5:00 de la mañana llegó un grupo de por lo menos de 20 hombres armados, vistiendo prendas de uso privativo de las Fuerzas Armadas y con un brazalete rojo y negro (con las siglas Eln), justo en la entrada de la vía que lleva a la vereda El Diamante.

“Esa gente instaló eso y se devolvió hacia El Diamante, allá donde ellos siempre permanecen o se pasan fácilmente para Venezuela”, contó un habitante de esta población.

Minutos más tarde, la Policía fue alertada de lo sucedido y hacia las 6:00 de la mañana enviaron varias patrullas. Los uniformados acordonaron la zona y les avisaron a sus superiores.

Hacia las 12:30 de la tarde, los expertos en explosivos de la Policía Metropolitana de Cúcuta  llegaron escoltados por unidades del Grupo de Operaciones Especiales (Goes).

Lo que se podía ver a primera vista era que el cilindro tenía una antena. Además, le amarraron unos cables y un cordón detonante que lo extendieron hasta una zona boscosa. También se podía observar que con cinta le pegaron algo, que parecía como un celular.

Los antiexplosivos armaron el robot, que tienen para desactivar cualquier artefacto, y luego de una hora, pudieron certificar que el cilindro no tenía ninguna clase de explosivos, solo fue algo para llamar la atención.

¿Qué llevaba?

El robot se acercó al cilindro y por una cámara los expertos analizaron los cables, la antena y lo que le habían pegado con cinta. Ante eso, decidieron agarrarlo con uno de los brazos mecánicos y luego de moverlo para uno y otro lado, lo dejaron caer, pero no explotó.

Después, enviaron el robot hacia donde estaba amarrado el pasacalle, para verificar que no hubiese explosivos y como no encontraron anda, lo desmontaron. Aunque aún tenían dudas con el cilindro, decidieron ponerle una contracarga y hacerla explotar, para descartar cualquier otra situación.

Al ver que ya todo estaba seguro, uno de los uniformados recogió el cilindro y observó que para atraer su atención le pusieron una antena y unos cables para simular que era una bomba real. Lo que pegaron con cinta era una caja de cigarrillos.

Hacia las 2:00 de la tarde, la tranquilidad volvió y el dispositivo policial se retiró del sitio.

El Eln sigue demostrando que hoy es el grupo armado ilegal con más poder en Norte de Santander. Ayer, en su aniversario 57, volvió a dejar su huella plasmada en diferentes puntos del departamento. Toledo, San Bernardo de Bata, Tibú, Santiago, Teorama, Hacarí y Puerto Santander fueron algunos de los sitios donde esta guerrilla provocó momentos de miedo, incertidumbre y zozobra, al poner banderas, dejar calcomanías y mensajes, instalar aparentes artefactos explosivos y activar una caja bomba.

Activan caja bomba

Mientras que en Puerto Santander solo fue un falso cilindro bomba, en Hacarí la situación fue diferente. En este municipio del Catatumbo activaron una caja bomba que dejaron al lado de la casa cural.

El explosivo, según versiones, fue abandonado, esperando el paso de un grupo de policías y soldados que patrullaban en la madrugada esta población.

Pero, el más afectado por esta acción del Eln fue el sacerdote de Hacarí, pues su vivienda sufrió graves daños, al igual que el vehículo que estaba a su servicio.

El coronel Carlos Martínez, comandante de la Policía de Norte de Santander, aseguró que la carga explosiva fue contra la iglesia y la casa cural de ese municipio.

“Estas instalaciones donde la gente de Hacarí profesa su fe, la casa cural y el vehículo que solo sirve para fines sociales, que están protegidos por el derecho internacional humanitario y por los derechos humanos, fueron semidestruidos y atacados por estos subversivos que muestran qué clase de personas son”, sostuvo el oficial.

El mando policial también indicó que esas acciones no los intimidarán y seguirán persiguiendo a los guerrilleros para ponerlos en la cárcel.

Bandera y caja sospechosa

En la vía que del corregimiento Cornejo (San Cayetano) conduce a Santiago el Eln también instaló algunas banderas y cerca de una de ellas dejó una caja sospechosa.

Aunque en redes sociales circularon varios videos, hasta el cierre de esta edición, la Policía no entregó información sobre su desplazamiento a revisar y evitar que sucediera una tragedia.

La Opinión solicitó a la oficina de prensa de la Policía de Norte de Santander información sobre este hecho, pero guardaron silencio.

Ataque a la estación de Policía

La estación de Policía de Teorama también fue atacada a bala ayer, al mediodía. Por más de una hora se registró un cruce de disparos, que provocó pánico entre la población.

Algunas versiones señalaron que un grupo de guerrilleros del Eln disparó contra los uniformados, pero se desconoce de heridos.

Mensajes del Eln

En Toledo también se presentaron momentos de tensión, pues en varias vías aparecieron banderas del Eln y un artefacto sospechoso.

Por redes sociales se mostraron imágenes de esta situación a la que tampoco la Policía respondió sobre lo sucedido.

Maleta sospechosa

En Pamplona se vivieron momentos de tensión a raíz de una maleta sospechosa que abandonaron frente al cantón militar.

Por más de dos horas un grupo de militares expertos en explosivos tomaron las medidas pertinentes y así evitar alguna tragedia.

Después de la minuciosa inspección, los soldados se dieron cuenta de que fue una falsa alarma y la tranquilidad retornó.

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