El brutal asesinato de Mayerly Ipúz, de 29 años, en una zona boscosa cerca de Neiva, Huila, ha generado una profunda conmoción y repudio.
La víctima fue encontrada semidesnuda y con signos de violencia extrema, posiblemente después de ser empalada y apuñalada, en un trágico suceso que ha dejado consternada a su familia y a las autoridades locales.
El lunes, se realizó un consejo de seguridad en Neiva para revisar los avances en la investigación del caso. Durante la reunión, la Policía informó sobre una posible implicación de una mujer en el crimen.
Según unidades de inteligencia de la institución, supuestamente, la víctima estaba con su victimaria realizando un actos sexuales en dicho lugar, pero se dio una riña con una persona que en ese momento llegó al sitio, esa persona sería la sospechosa.
Esta teoría sigue siendo objeto de investigación, con la revisión de grabaciones de seguridad en curso para esclarecer los detalles de este horrendo homicidio.
Se especula que los celos podrían haber motivado a la presunta responsable del crimen. Es importante destacar que Mayerly no era habitante de calle, sino que tenía una condición especial debido a problemas mentales, según su hermana Azucena Ipúz.
Azucena ha pedido justicia y ha aclarado que Mayerly era madre de un niño que no estaba bajo su cuidado debido a su condición mental.
Según relata, la víctima sufrió daños mentales a los 19 años debido a una bebida extraña que le fue dada, y a pesar de varios intentos médicos por estabilizarla, no se encontró una cura. La familia afirma que Mayerly nunca mostró comportamientos agresivos y que su único problema era su salud mental.
Este trágico incidente ha dejado a la comunidad consternada y exige respuestas y justicia para Mayerly Ipúz y su familia.