Un patrullero de la Policía falleció en circunstancias que aún son materia de investigación. El uniformado fue hallado sin vida en una residencia después de que un delincuente, al que estaba custodiando, lograra escapar, en Bogotá.
La tragedia comenzó cuando el patrullero, identificado como Richard Steve Pava Maza, acompañó a un detenido, acusado de hurto agravado y calificado, a una cita médica en el Hospital El Tunal.
El prisionero, identificado como Manuel Antonio Hernández Roa, convenció al policía de llevarlo a una vivienda en el barrio Marco Fidel Suárez para encontrarse con su pareja sentimental, según reportó Noticias Caracol.
Todo indica que esta solicitud fue una trampa, ya que el delincuente se fugó del lugar en compañía de una mujer en una motocicleta, desencadenando así un operativo de búsqueda. El preso logró escapar con las esposas puestas.
Este hecho generó una notable angustia al patrullero quien decidió esconderse en un parqueadero, donde presuntamente se quitó la vida con su arma de fuego después de recibir los regaños por parte de sus superiores.
«Me quitaron el armamento. ¡Ay, Dios mío, señor!», se escucha en uno de los audios filtrados en el informe periodístico.
Además, en notas de voz se percibe a una de sus compañeras tratando de defenderlo: «Que las unidades verifiquen, como todo el mundo sale al medio a regañar al muchacho».
