Jairo López, de 42 años, se convirtió en la víctima de un trágico episodio de intolerancia en Bogotá.
Según relató la esposa de López, él tenía un puesto de venta de comidas rápidas en el sector de Las Américas, en Bogotá. Durante más de una década, su negocio siempre ubicado en el mismo lugar, junto al centro comercial Plaza Central.
El fatídico incidente ocurrió cuando López llegó a trabajar como de costumbre alrededor de la 1:00 de la tarde.
Ese día, otro vendedor ocupaba el espacio que habitualmente utilizaba el hoy fallecido.
Ante el reclamo de López para que desocupara el lugar, el otro vendedor sacó un cuchillo y lo apuñaló, propinándole tres heridas mortales, según informó la esposa de la víctima, quien clama por justicia.
Tras el ataque, el agresor intentó escapar, pero fue detenido por la comunidad local.
A pesar de ser trasladado a un hospital cercano, Jairo López no pudo recuperarse de las graves heridas y falleció.
La esposa de la víctima informó que el agresor se declaró inocente durante la audiencia, a pesar de ser capturado con el cuchillo utilizado en el asesinato.
Actualmente, el homicida se encuentra bajo custodia de las autoridades judiciales, y el proceso legal está en curso, aunque faltan algunas pruebas para determinar la condena.
Ante esta lamentable situación, el director del Instituto para la Economía Social, Alejandro Rivera, expresó su compromiso de suscribir pactos para evitar problemas en el espacio público en Bogotá.
Destacó la importancia de apoyar a la esposa de la víctima, una vendedora informal, para que pueda seguir ejerciendo su derecho al trabajo, y subrayó la necesidad de prevenir la pérdida de vidas en el espacio público.
