Durante la mañana de este martes, 12 de septiembre, se registró un sorprendente caso que evidencia la imprudencia e irresponsabilidad de algunos de algunos conductores, pues las autoridades de tránsito sorprendieron a un hombre que iba conduciendo una ambulancia mientras estaba borracho.
El imprudente conductor se encontraba transitando en la localidad de Kennedy en Bogotá cuando unos agentes de tránsito le hicieron la señal de “pare”, pues notaron que tenía las sirenas y las luces de emergencias encendidas, pero estaba manejando de manera extraña.
“Al verificar esta conducta, los agentes requirieron al conductor de la ambulancia para determinar si estaba prestando un servicio legítimo de emergencia. Sin embargo, al acercarse, notaron signos de aliento alcohólico en el conductor”, indicó la mayor Mildred Montilla, comandante operativa de la seccional de Tránsito de Bogotá, a CityTV.
Cuando las autoridades se dieron cuenta del aparente estado de embriaguez del sujeto, le realizaron una prueba de alcoholemia, lo detuvieron y sancionaron.
¿Qué pasó con el conductor borracho de la ambulancia?
Al validar la documentación del vehículo, las autoridades se percataron de que el vehículo era una camioneta de carga que modificaron para prestar los servicios de una ambulancia. Como nunca se notificó a Tránsito que la camioneta estaba siendo utilizada como vehículo de emergencia, se impuso una multa de 27 millones de pesos para la persona responsable del automotor.
Cuando le preguntaron al imprudente conductor de dónde venía, el hombre contestó que regresaba de una actividad familiar, cosa que no era cierta, pues al poco tiempo terminó confesando que en realidad venía de una fiesta.
Por andar manejando borracho y en una supuesta ambulancia, la Policía lo multó con 720 salarios mínimos diarios legales vigentes, la suspensión de la licencia de conducción por 10 años y la inmovilización del vehículo por 10 días hábiles, además de la obligación de ejecutar 50 horas de servicio comunitario.