Un hombre que se haría pasar como instructor de una escuela de fútbol estaría ganándose la confianza de varios menores a la salida de un colegio para poder robar sus casas en los barrios Olarte y Nuevo Chile (Bosa).
Varias madres y padres de familia están preocupados por estos días en los barrios Olarte y Nuevo Chile (Bosa), debido a la presencia de un hombre que se está aprovechando de los más pequeños del sector para ingresar a varias viviendas de la zona y hurtar dinero y objetos de valor.
Los hechos, que fueron alertados por la madre de uno de los niños abordados por el sujeto, dejaron en evidencia varias inquietudes que tienen los familiares de los niños y niñas que estudian por el colegio Nuevo Chile, preguntándose ¿qué clase de personas se hacen al frente del colegio para analizar a sus hijos?
La pregunta se la hacen por estos momentos las familias de tres jóvenes que estudian en el centro educativo, ubicado por la Calle 56 sur Carrera 72D, luego de que el pasado viernes 3 de marzo un hombre, quien aseguró ser instructor de una escuela de fútbol, presuntamente se habría ganado la confianza de tres niños (de 9, 10 y 11 años) a la salida de su jornada escolar.
Lo peor del asunto es que a los pelados les “habrían suministrado alguna especie de droga”, según denunció una de las madres, pues los infantes llevaron al extraño con total confianza hasta su casa, nunca opusieron resistencia ni fueron amenazados con armas, y les entregaron todos los objetos de valor que encontraron dentro de sus casas sin rastros de violencia.
“Supongo que el tipo lo que hace es estudiar a los niños a quienes les va a hacer eso y a la mayoría los aborda, les dice que hay un curso de entrenamiento de fútbol y que solo deben pagar cierto dinero. Luego, comienza a preguntar que cuánto dinero tienen sus papás y en dónde lo guardan”, le comentó a Q’HUBO Sandra, la mamá de uno de los afectados.
Acto seguido, “es cuando suponemos que comienza a utilizar una especie de sustancia psicoactiva, la cual les suministra para que pierdan la consciencia de lo que dicen y hacen”, añadió la mamá.
Los menores comenzaron a presentar dolores de cabeza, estómago y cansancio excesivo, y luego de llevarlos al médico en los tres casos había señales de una posible intoxicación.
La madre de uno de los menores afectados destacó que “la sustancia no la han identificado, pero tenemos entendido que la utiliza por medio de los documentos para supuestamente afiliarlos, porque el falso instructor les dice que sus padres necesitan firmar algo y comienza a mover unos papeles, los cuales deja aturdidos a los niños”.
El caso fue alertado ante unidades del CAI Villa del Río, pero hasta el momento el sujeto sigue libre y campante haciendo de las suyas.
