Con el Toque de Queda desde las 8:00 de la noche los dueños de los bares y tabernas fueron los más perjudicados; en sus palabras, afirmaron: “va en contra del funcionamiento de nuestros negocios”.
Sin duda que actividad nocturna volvió a poner freno a sus negocio, con esta nueva medida que va hasta el 3 de mayo.
Para Daniel Santiago Duarte, presidente de Unibares, decenas de bares decidieron cerrar indefinidamente y entregar sus negocios. Prefieren dejar de pagar arriendo y otros gastos a trabajar a pérdida solo por 2 o 3 horas.
El gremio dice que recibió con respeto la decisión de las autoridades frente a la alerta roja por UCI, pero hizo un llamado de urgencia para que se subsanen las millonarias pérdidas que la pandemia ha dejado al sector más golpeado en este último año.
Según René Rincón, vocero de estos establecimientos nocturnos, “mientras a nosotros nos atan las manos para abrir más tiempo, proliferan las fiestas clandestinas que en últimas son las que más han disparado los contagios del Covid-19”.
Una medida que veían venir los dueños de establecimientos nocturnos, pero que deja en quiebra a más del 75% de ellos.
“En toda la pandemia ha sido terrible. Los únicos afectados hemos sido nosotros, los de los negocios nocturnos. Ahora nos toca abrir a las 4:00 de la tarde hasta las 8:00 de la noche, pero eso no da ni para pagar los $7 millones del arriendo mensual”, sostuvo Fernando Cardozo, administrador de uno de los negocios de ‘Cuadra Play’.
“castigo a los formales”
El gremio de restaurantes señala que no se puede seguir castigando a la economía que paga impuestos y genera empleos.
Los empresarios y comerciantes de restaurantes, cafeterías y ventas de comidas rápidas, también se vieron afectados con el decreto 0182.
Diana Tabares, presidenta de Acodres en Santander manifestó que “no se favorece en nada a quienes viven de las ventas de comidas en horas nocturnas, ya que por cuestiones de tiempo nadie va a asistir a un restaurante a las 6 de la tarde sabiendo que a las 8 p.m deben estar en casa, además los pedidos por el sistema de domicilios son pocos.
La situación económica de estos negocios, que generan unos 10 mil empleos en los cuatro municipios metropolitanos, les está generando la quiebra.
