Por cada 10 llamadas que atiende la Policía Metropolitana de Bucaramanga a través de la línea 123, más de ocho comunicaciones no son emergencias reales y en muchos casos se trata simplemente de burlas o de situaciones que requieren la intervención de otro tipo de entidad, como por ejemplo la Dirección de Tránsito.
Ante este significativo indicador sobre el “mal uso” de la línea 123, la policía envió un mensaje de consciencia a la población para que eviten los llamados inoficiosos, que generan pérdida de esfuerzos y traumatismos para las autoridades.
Las estadísticas oficiales son abrumadoras. De las 1.636.456 llamadas atendidas por la Policía Metropolitana en lo corrido del presente año, 1.405.524 casos obedecieron a comunicaciones con burlas o a situaciones que no revestían carácter de urgencia.
Es decir, en los casi nueve meses transcurridos de 2021 se registraron 230.932 llamados de emergencia auténticos.
Además de la pérdida de tiempo que se ocasiona a las autoridades y de la ocupación que se genera en tal canal de atención, la inadecuada utilización de este sistema de respuesta a emergencias también acarrea un castigo con una multa que se acerca al millón de pesos.
“Diariamente nuestros uniformados atienen un promedio de 969 casos relacionados con requerimientos ciudadanos hechos a la línea de emergencia, lo que equivale aproximadamente a 40 casos por hora. Sin embargo, muchos de ellos no terminan siendo el pedido real, sino por el contrario relacionados con casos vehículos mal estacionados, niños jugando en la vía, entre otros, lo que en algunos casos dificulta a los cuadrantes el trabajo de la seguridad”, informó la Policía Metropolitana de Bucaramanga, Mebuc.
Casos para usar el 123
La línea 123 se creó con el fin de brindar una respuesta inmediata y coordinada, no solo de la Policía, sino también de organismos de rescate y socorro como Bomberos y Defensa Civil, entre otros.
Es un canal para reportar situaciones en las que hayan vidas en riesgo o amenazas contra la integridad de los ciudadanos o su patrimonio, a raíz de eventos de inseguridad y orden público.
