Aunque se calcula que alrededor del 70 % del parque automotor registrado en el área metropolitana ocasiona impactos en Bucaramanga, en la capital santandereana está matriculado apenas el 27 % de la totalidad de estos vehículos.
Es decir, a pesar de que Bucaramanga debe soportar la mayor cantidad de tráfico, de accidentes viales y de deterioro en la malla vial, actualmente no recibe ni la mitad de los ingresos que anualmente se generan con el registro de dicho parque automotor.
A través de una solicitud formal que se presentó ante el Ministerio de Transporte, el Área Metropolitana de Bucaramanga, AMB, planteó que este tipo de matrículas se realicen en el mismo municipio de residencia del propietario del vehículo, y no en otras localidades.
Se trata de una propuesta que busca la modificación de la normativa existente. A través del Artículo 37, el Código Nacional de Tránsito Terrestre o Ley 769 de 2002 dejó en claro que “el registro inicial de un vehículo se podrá hacer en cualquier organismo de tránsito”.
Pero las autoridades locales señalan inconvenientes en esta normativa. Mientras en Bucaramanga y su área aumenta la circulación de automotores con placas y matrículas de municipios como Los Patios y Villa del Rosario, las direcciones y secretarías de tránsito metropolitanas dejan de recibir recursos que se podrían destinar en labores como la gestión, control y despeje vial.
El AMB, como autoridad de transporte en la conurbación, le solicitó al Mintransporte “el emparejamiento de la ciudad de registro con la ciudad de residencia del propietario”.
La entidad argumentó que “esto garantizaría un ingreso proporcional y justo que permitiría la inversión requerida por los grupos de control vial”.
En el caso de Bucaramanga, por ejemplo, las estadísticas de las autoridades advierten que el municipio dispone de 166 agentes de tránsito, pero debería tener como mínimo 364 uniformados para ejercer control vial de manera oportuna.
En un año aumentó 11 % el parque automotor
Durante 2022 el parque automotor del área metropolitana de Bucaramanga aumentó hasta los 849.000 vehículos registrados. Según el AMB, en comparación con 2021 se evidenció un incremento del 11 % en tales registros.
El municipio con el mayor número de matrículas es Girón, el cual suma en total 407.703 automotores, lo cual representa el 48% de los vehículos matriculados en la conurbación.
Luego aparecen Bucaramanga 233.779 (27 %), Floridablanca 185.931 (21 %), y Piedecuesta 21.587 (2 %).
El “desequilibrio” que advierte el AMB es evidente al comparar la cantidad de vehículos registrados en Girón, en comparación con su población, que ronda los 200.000 habitantes. Es decir, por cada gironés existen, aproximadamente, dos automotores matriculados en dicha localidad.
“Desde hace unos años venimos sufriendo esa falta de control vial, debido a que las capacidades institucionales fueron superadas por el crecimiento del parque automotor. El problema es que muchos propietarios de vehículos están tributando en otros municipios”, advirtió Fabián Fontecha Angulo, subdirector de Transporte del Área Metropolitana de Bucaramanga.
Sobre aquellos casos de propietarios que matriculan sus vehículos en otras ciudades y departamentos, a modo de comparación el funcionario señaló que “por ejemplo, es como si una persona pagara el impuesto de alumbrado público en otra región, que ni siquiera conoce, y no va a ver ningún beneficio en el municipio en donde vive… no tiene sentido”.
Advierten “incentivos perversos”
El principal motivo por el cual los propietarios de vehículos hacen dicho registro en municipios diferentes al de su residencia es la reducción en el costo de la matrícula.
Conforme con lo explicado por Fontecha Angulo, las entidades netamente públicas como la Dirección de Tránsito de Floridablanca, por ejemplo, no pueden competir de manera justa con los valores ofrecidos por aquellos organismos de tránsito que operan mediante alianzas o sociedades con entes privados.
“Este tipo de descuentos son insuperables para las entidades públicas. En Bucaramanga, en algunos concesionarios los asesores le dicen al comprador que matriculen por fuera del municipio y a la persona le toca insistir para que sea matriculado en la ciudad. Es porque hay incentivos para convencer al cliente o usuario. Este tipo de incentivos no existen en lo público, mientras los privados sí lo pueden hacer”, indicó el funcionario.
Además de pretender un equilibrio y repartición “justa” en los ingresos anuales por la matrícula del automotor, a través de la solicitud elevada ante Mintransporte también “buscamos que se eliminen estos incentivos perversos en los registros. Poner a competir a los organismos de tránsito por estos registros no tiene mucha lógica, teniendo en cuenta que cada tránsito debe hacer inversiones en su localidad”, agregó el funcionario del AMB.
