“Hemos escuchado a los bomberos y sus requerimientos, y hemos escuchado sobre la realidad del aeropuerto de San Gil. Ayer recibimos finalmente las obras y con las mismas ponerlo en funcionamiento antes de que termine este año. Hay una propuesta real de Easyfly, dependemos de unos pequeños detalles para que empiecen las primeras operaciones aéreas de Bogotá, Medellín con San Gil y Barichara”, precisó el ministro de Transporte.
Agregó que los empresarios, como Aviatur, aportarán esfuerzos a esta activación de operación aérea en Santander con la compra de sillas que garanticen las rutas.
“Tuve la oportunidad de aterrizar en el aeropuerto Los Pozos de San Gil y constatar la finalización de sus obras, esta es una oportunidad para decirle al departamento que el Gobierno trabajará por aeropuertos e infraestructura de transporte óptima que fortalezca el turismo”.
También el ministro Reyes hizo un recorrido por algunos municipios de Santander, quien busca reconocer la necesidades de los municipios y estructurar un plan de trabajo con los mandatarios locales. “Hablamos de proyectos y estrategias enfocadas a impulsar la conectividad aérea y vial de esta importante zona”.
Hay que recordar que a mitad de año el gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, dijo: “Con $2.000 millones garantizamos la culminación del aeropuerto Los Pozos de San Gil. Se hizo un reajuste al proyecto inicial de esta obra para lograr que no se convirtiera en un ‘elefante blanco’…”.
Actualmente, al aeródromo llegan vuelos chárter, ambulancias aéreas y otro tipo de vuelos especiales, pero la idea es conseguir una frecuencia comercial con diferentes aerolíneas y para eso el principal requisito es que la terminal de pasajeros sea por fin culminada.
Empresa de economía mixta
Si los tiempos se cumplen, el balón estará en territorio de la Alcaldía de San Gil, que luego de esto deberá definir un operador para la administración del aeródromo.
Esa empresa será la encargada de negociar con las aerolíneas y de definir cuáles serán los servicios de apoyo terrestre que les brindará a los aviones y los pasajeros.
El operador, además, tendrá que garantizar una inyección de recursos de $14.000 millones aproximadamente para la construcción de hangares y una pista paralela, que servirán para la prestación de servicios mecánicos y el funcionamiento de escuelas de aviación.
De acuerdo con los estudios de consultoría, estas serían el fuerte financiero de la operación, contó Hermes Ortiz, alcalde de San Gil.
Sobre la selección del operador, el mandatario dijo que hay una decisión y es que se hará a través de una empresa de economía mixta en donde el municipio tenga la mayor participación.
Lo que ya está listo son las condiciones tributarias que fueron aprobadas por el Concejo de San Gil en 2021.
