De acuerdo con el Instituto Nacional de Vías, dos tramos registran altas afectaciones e hicieron que se tomara la decisión de ordenar el cierre total de la carretera.
Se trata de una pérdida parcial de banca en el sector aledaño a Pozo Bravo, en el kilómetro 111, y un derrumbe en el kilómetro 82.
La entidad aclaró que por las difíciles condiciones climáticas, el pasado domingo hubo trabajos en los puntos mencionados. «Se coordinó la presencia de personal y movilización de maquinaria el día lunes a primera hora, siempre y cuando las condiciones climáticas y de seguridad para el personal lo permitan», aseguró.
Asimismo se dispuso personal del contratista y los microempresarios del Invías continúan la inspección y monitoreo de los tramos que presentan flujo de lodos y caída de material en tiempo real.
La entidad estableció como ruta alterna el corredor vial Bucaramanga-Cuestaboba-Pamplona-Málaga.