Lamentablemente esta es la realidad de varios pequeños, que diariamente temen por su vida al momento de ir a estudiar. Ya que son atacados constantemente por sus compañeros mayores e incluso menores que ellos.
Ya no quiere volver al colegio
Con tan solo 6 años un niño piedecuestano que cursa segundo grado de primaria, ya es objeto de acoso escolar por parte de algunos compañeros, al igual, menores de edad, que asisten a la misma institución educativa.
Q’hubo tuvo la oportunidad de hablar con la madre del niño, quien explicó que los compañeros de su hijo le quitaban la comida del refrigerio, le partían sus útiles escolares, usaban con expresiones fuertes con el menor y lo maltrataban físicamente, ya que en algunas ocasiones lo empujaban y llegaron a rasguñarle su rostro.
Este niño lleva un mes y 15 días de clases, actualmente ya no quiere volver a la institución, pues se encuentra nervioso y con mucho miedo a causa de los actos de sus compañeros, quienes serían mayores y otros menores que él.
“Estoy esperando qué solución me dan para cambiarlo de colegio. No sabemos si con el tiempo va llegar otro niño, lo va a empujar y me lo van a entregar vuelto nada”, manifestó la madre del pequeño.
La madre del menor piedecuestano solo pide que reubiquen a su hijo en otro colegio, uno donde no sufra de bullying.
Según Adela Silva, secretaria de Educación de Piedecuesta, el 17 de marzo se reunió con la mamá y abordó el tema con el rector del colegio.
“Son muchas las problemáticas de bullying, maltrato, situaciones de niños abusados, abandonados, con falta de apoyo por parte de su familia, y todo esto hace que los niños se estén comportando de esta manera”, indicó Silva.
“Le doy gracias a Dios que mi hijo me contó las cosas y que no se pasó a mayores”, dijo la madre del estudiante.
El bullying lo mandó al hospital
Este es otro caso que evidencia la fuerte realidad del acoso escolar. En Bucaramanga un menor de 15 años resultó lesionado, luego de que otro joven de la misma institución educativa lo empujara hasta terminar en el sueño.
Parece ser que al terminar la jornada de clases, el joven fue derribado por un compañero. Esta acción le dejó al menor una fractura en su antebrazo, la cual lo ha tenido en el hospital desde hace 10 días..
Tal indicó, Juan Pablo Serrano, subgerente de servicios quirúrgicos del Hospital de la Universidad de Santander, al estudiante se le hizo la admisión por el servicios de urgencias y atención por el servicio de ortopedia.
A la fecha el jóven tiene pendiente el manejo quirúrgico, también la puesta del material osteosíntesis por parte de su asegurador. Se espera que durante esta semana se haga la corrección quirúrgica.
Según las declaraciones que la abuela del estudiante le dio al medio de comunicación Noticias Caracol, las agresiones contra su nieto eran constantes en el colegio, ya que también le dañaron sus objetos personales.
Ante esta situación, la secretaria de Educación de Bucaramanga, Ana Leonor Rueda, manifestó que se han venido revisando las denuncias que han llegado, y al momento se encuentran en contacto con la rectora de la institución educativa a la cual asisten los menores de edad.
“Hacemos un llamado a la ciudadanía, a los padres de familia y maestros para que cuidemos entre todos a los niños, niñas y adolescentes. Estamos trabajando con Desarrollo Social, Secretaría del Interior, con los rectores y comités de convivencia escolar para mitigar todos estos riesgos”, argumentó Rueda.
Casos como estos se presentan diariamente en miles de instituciones escolares alrededor del territorio santandereano. Esta es una invitación a reflexionar ante el acoso escolar, ya que el día de mañana puede afectar severamente a nuestros niños.
