Se necesitan sólo cinco minutos para tratar la hiperplasia prostática, mediante un procedimiento que se realiza por primera vez en Santander en el que utilizan vapor de agua.
Esta enfermedad que consiste principalmente en tener dificultad para empezar a orinar, aumento en la frecuencia urinaria y goteos después de ir al baño, se presenta en la mayoría de los hombres adultos, puede tratarse y empezar a tener mejoría a los 15 días de la corta intervención que se realiza en el Hospital Internacional de Colombia (HIC).
¿En qué consiste?
La Terapia de Vapor de Agua, como es conocida, requiere una pistola con un extremo delgado para ingresar por la uretra y según el jefe de Urología del HIC, Wilmer Rivero Rodríguez, “una vez adentro, llegamos a la zona prostática y administramos cantidades pequeñas de vapor de agua a una alta velocidad y presión para atrofiar el tejido que afecta el paso normal de la orina”.
Esto, que fue desarrollado hace 4 años, se convirtió en una alternativa distinta a los tratamientos convencionales como los medicamentos y las cirugías.
La gran ventaja de la terapia, de acuerdo con Rivero Rodríguez, es que “las complicaciones son escasas y se hace una preservación completa de la función sexual en todos sus aspectos como lo son la erección, el deseo y la eyaculación”.
Una vez terminada, se instala una sonda temporal -durante 7 a 10 días- la cual disminuye la sensibilidad urinaria y permite la salida de la misma sin ninguna restricción.
Asimismo, el centro médico anunció que hay estudios clínicos que han evidenciado que “los resultados positivos de la intervención se sostienen durante al menos 5 años y ya se están realizando análisis para evaluar la evolución en un plazo más largo”.
