Unos ladrillos y rejas que por años conformaron la zona de portería y administración del sector 18 de Bucarica en la ‘Ciudad Dulce’, son motivo de discordia en el complejo residencial.
Y es que según Nelly_Rodríguez, administradora del sector, mientras que un par de vecinos fueron los que se opusieron a la existencia de estos elementos -tal vez pensando en el bien de visitantes- la gran mayoría de habitantes está a favor del encerramiento, pues esto les da más seguridad.
“Dos residentes de la comunidad instauraron una acción popular y el Juzgado 9 de Bucaramanga, falló en primera y en segunda instancia, a favor de que se derribara el encerramiento y se demoliera la sede de la administración, la portería y la caseta de venta de víveres de primera necesidad que se puso, pues años atrás ocurrió un accidente trágico en el que un vecino murió por salir a buscar una gaseosa.
“Se nos está cayendo una de las barreras de seguridad de la copropiedad, ya nos tocó quitar las rejas y uno lo que ve es que ellos como que peleaban por los derechos de las personas ajenas a las que viven aquí, porque decían que la gente no tenía libre acceso al conjunto por el área que quisiera entrar, descuidando los derechos de los residentes y propietarios internos”, precisó Rodríguez.
Asimimo, Nelly señala que aunque se defendieron con abogados para que permaneciera la zona, no hubo forma de lograrlo y ahora lo que queda es acatar y trabajar por aportarle a la seguridad, pues ahora sienten mucha preocupación.
“Fueron 2 años de defender esta situación, lo llevamos hasta Consejo de Estado, pero nadie nos escuchó. Ni en el Concejo hicieron algo por las 158 familias restantes, porque esta es una comunidad organizada que le ayuda mucho al municipio en ahorro de presupuesto.
“Las rejas ya se bajaron (ayer en la mañana) y no tenemos fecha para la demolición porque eso hay que coordinarlo con la Alcaldía, sin embargo, nos quedan 3 meses para cumplir”, puntualizó.
Q’hubo le solicitó a la Administración contactos de quienes instauraron la acción legal, pero Rodríguez expresó que los dos vecinos manifiestan no tener número telefónico.
