En Santander el aguacate es sinónimo de acompañante para el tradicional mute, cremas, sopas, fríjoles, ensaladas, cazuelas y todo platillo salado que se le ocurra. Pero ¿El aguacate y el dulce se llevan bien?, ¿Qué más puede ofrecer esta fruta además del complemento perfecto del almuerzo?, ¿Es realmente un producto que puede llevar el sello ‘made in Colombia’?
Persea americana
Persea americana es el nombre científico de este manjar criollo , el cual proviene de una especie arbórea del género Persea. De ahí sale tan confuso nombre.
Es habitual que haya una gran confusión alrededor del ‘oro verde’, aunque se pueda pensar que es una hortaliza o legumbre, lo cierto es que es una fruta con origen en América del Norte. Y es tan antiguo que no se tiene clara la fecha de descubrimiento de esta baya comestible, de hecho, existen evidencias de su consumo en el valle de Tehuacán (Puebla, México), que tienen entre 9 mil y 10 mil años de antigüedad.
Fuera del almuerzo
Más allá de la historia y nombres técnicos, la cantidad de preparaciones abunda por internet y sorprende cada vez más a sus consumidores. Un claro ejemplo de esto es el desayuno, imagine que en vez del cafecito de la mañana tenga en su mesa un batido compuesto por leche, miel y aguacate.
Es impensado para el más purista, pero una montaña rusa de sabor, textura y color para quien lo prueba por primera vez en Piedecuesta. Doña Slendy Moreno es quien todos los días sorprende a su clientela con las malteadas de aguacate de tan solo 3 ingredientes y ninguno de estos es el azúcar.
Traídos directamente desde Rionegro, los aguacate choqué y semir que ofrecen en este local, se venden en libras, bolsitas de guacamole y vasos de 14 onzas. “En Brasil es muy común que el jugo de aguacate se venda por las calles y mi esposo decidió apostar por esta idea que ha sorprendido a los locales y los turistas” añadió Martínez, oriunda de San Pablo, Bolívar, pero con el corazón santandereano.
Delicioso, dulzón, cremoso y natural son los adjetivos a la hora de definir el sabor de este batido verde que cuesta sólo 6 mil pesos el vaso. Muy común en dieta de deportistas y excelente multivitamínico, es ideal para empezar el día. Su fama mundial ha hecho que el ‘avocado toast’ o tostada de aguacate, sea un infaltable en todo desayuno fitness, el cual se ofrece en los mejores hoteles. Algo tan sencillo como una tostada acompañada de rodajas de aguacate encima y una pizca de semillas de sésamo puede costar 2 a 3 dólares la unidad.
En pastelería
Desde este año se ofrecen también los brownies de aguacates o torta de aguacate, receta en la cual la mantequilla y chocolate se vuelven los mejores aliados de la baya verde. Una de los emprendimientos responsables de traer estos sabores a Colombia es Sin Remordimiento, una repostería consciente que hace envío a nivel nacional e internacional a Estados Unidos.
En los aliños
Aguacateria Chepita es el negocio bumangués que trae los aliños listos para consumir a base de aguacate, como lo son el guacamole, el aceite de aguacate y hasta una malteada verde que en efecto lleva incorporado el sabor del oro verde.
Este laboratorio del aguacate se encuentra ubicado en la calle 113N #32-79 local 14 en las Torres del Bicentenario del barrio Niza, puede preguntar por chepita y atreverse a saborear esta fruta única en una sorprendente presentación.
