El 19 de septiembre, dos santandereanos emprendieron un viaje rumbo a Medio Oriente. El itinerario planeaba un vuelo de Bogotá hasta Madrid para luego abordar un avión hasta Tel Aviv, para conocer Israel. Sin embargo, el viaje se convirtió en una pesadilla para los viajeros quienes quedaron en medio del fuego cruzado entre el grupo terrorista Hamás, desde la Franja de Gaza, y el Ejército israelí.
Jorge Eliécer Hernández, de 55 años; y su hijo, Jorge Mario Hernández, de 30 años, también fueron víctimas del ataque sorpresa que Hamás emprendió en contra de Israel, desde la Franja de Gaza, en una cruzada que no se veía desde hace algunos años, y que se orquestó de forma milimétrica desde hace más de un año, como lo confirmaron las tropas atacantesEl sábado, 7 de octubre, mientras la comunidad de Israel estaba en el shabat shalom, conocido así como el día de descanso, Hamás reventó los primeros cohetes en una lucha por el territorio que, considera, le ha sido quitado desde hace varias décadas.
Del lado opuesto, ni la comunidad ni el Ejército israelí esperaban en ataque. «Fue sorpresa. Los cogieron fuera de base», afirmó Jorge Mario Hernández, quien logró regresar a Colombia debido a que el plan turístico ya tenía contemplado el retorno el 10 de octubre.
«En Jerusalén las alarmas empezaron a sonar temprano ese sábado. Suenen en toda la ciudad. No sabíamos nada. Alguien nos hizo comentario de que Israel tenía búnkeres para la guerra, pero que nunca pasaba nada», afirmó el santandereano.
Jorge, quien es ingeniero de Petróleos, aseguró que los misiles pasaban por encima del hotel en el cual se estaban hospedando, mientras las autoridades pedían que corrieran a los búnkeres para resguardarse.
«El domingo salimos y la gente estuvo en la calle. Como Israel estaba en guerra casi nadie salía. Amigos latinos viajaron ese domingo por vuelos programados y les cancelaron los vuelos», afirmó el hombre.
Retorno a Colombia en medio de la guerra
Anteponiendo el deseo de regresar a su país de origen y con el temor latente por la guerra que ya deja más de 3.000 personas sin vida entre la Franja de Gaza, del lado palestino, e Israel, los tres colombianos decidieron llegar hasta el aeropuerto en Tel Aviv.
«El martes viajábamos a las 5:00 de la mañana. Cuando llegamos al tercer piso empezaron a sonar las alarmas. Estaba lleno el aeropuerto y la gente estaba ahí. Entramos a búnker como 20 minutos», afirmó Jorge Mario Hernández.
En el mismo aeropuerto y con el riesgo latente por los misiles que cruzaban por el cielo pese a los sistemas antiguerra de Israel, esperaron por unas horas mientras autorizaron el ingreso al avión y pudieron emprender el viaje hacia Colombia.
Su llegada al territorio nacional se pudo lograr debido a que los tiquetes estaban comprados desde antes que estallara la guerra. En este momento las aerolíneas no están vendiendo pasajes y no es fácil acceder a uno.
En las últimas horas, en un vuelo de la Fuerza Aérea Colombiana, FAC, cerca de 110 personas llegaron al país en medio de un viaje humanitario que organizó el Gobierno del presidente Gustavo Petro mientras cerca de 230 personas continúan esperando ‘luz verde’ para abordar un avión y abandonar la guerra que se recrudece con el paso de las horas.
