Aunque el gobernador de Santander Mauricio Aguilar Hurtado, había dicho que a partir de hoy, 1 de junio, en Santander, no se tendrían más medidas restrictivas como el toque de queda, la ley seca y el pico y cédula, tanto para movilidad general como para el expendio de licores en establecimientos nocturnos, la decisión definitiva se toma en la mañana de hoy.
Trascendió, eso sí, que en el papel hoy se liberarían estas restricciones: “Por ahora solo puedo decir que esperaremos a hoy para tomar medidas al respecto”, dijo Miguel Ángel Moreno, alcalde Floridablanca.
En palabras del alcalde de Bucaramanga, Juan Carlos Cárdenas Rey, “las decisiones que se tomen deberán contemplar el respeto por la vida y obviamente un equilibrio en el tema de la reactivación económica en el área metropolitana”.
Si bien todo parece estar ya casi que concertado, la ‘luz verde’ se encendió con el respaldo brindado por Minsalud; de hecho, en la tarde de ayer se adelantaba una reunión con los representantes de los diferentes sectores económicos para definir de qué manera se podría iniciar y avanzar gradualmente, pues hay varios de estos que tras 15 meses de pandemia no han podido retomar labores.
La propuesta es reactivar grandes proyectos de ciudad con una vigorosa inversión pública y privada, contando con acompañamiento empresarial, alivios fiscales y cooperación internacional.
De hecho, según la Alcaldía de Bucaramanga, se tiene en la mira recuperar los 41.000 empleos que perdió la ciudad durante la emergencia por la COVID-19 a través de la estrategia de reactivación.
Este plan de acción, que ya fue presentado a la ciudad, fue respaldado por los representantes de los distintos gremios económicos de la capital santandereana.
Médicos se oponen
Contrario a lo que plantean los mandatarios y el comercio formal y teniendo en cuenta la alta ocupación de camas UCI en el área, los profesionales de la salud, entre ellos los epidemiólogos, les sugieren a los gobiernos del área no levantar las medidas restrictivas de modalidad e incluso solicitan recrudecerlas.
“Es inevitable tomar nuevas medidas que frenen las aglomeraciones, pues el área metropolitana registra un aumento en el número de contagios y en la velocidad de propagación del virus”, señalaron.
“La alerta debido a la ocupación actual de las camas UCI, que está en límites extremos, debería ser razón suficiente para, al menos, no levantar el toque de queda, ni la ley seca, ni mucho menos el pico y cédula”, dijeron.
Incluso los médicos les solicitaron a las empresas prestadoras de salud reforzar el número de pruebas COVID, para determinar de forma amplia el estado real y actual de la pandemia en Bucaramanga y en sus municipios vecinos.
