Riñas, agresiones, golpes y, en general, lesiones personales han sido un común denominador de los casos de intolerancia que se registran en la capital santandereana.
En los dos primeros meses de 2023, estos episodio registran mayores casos que los contabilizados en los últimos dos años, según estadísticas del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, que documentan que en Bucaramanga se han reportado 295 casos de lesiones a personas, casi cien casos más que el mismo período de 2022, anualidad en la que se registraron 198 casos.
Pero la Alcaldía de Bucaramanga tiene otras cifras. Según un vocero de la administración municipal, en los reportes que son llevados por la Policía Nacional hay una reducción de las lesiones personales frente a los primeros 60 días del año pasado. En esas cuentas, han disminuido en un 11 % las agresiones entre ciudadanos que acuden o llegan a ser reportadas por la Policía Nacional.
Frente a esta situación y el panorama que reconoce a Bucaramanga como una de las ciudades del país con mayor tasa de lesiones por cada cien mil habitantes, las autoridades se pronuncian al respecto.
¿Qué dice Medicina Legal?
Medicina Legal advierte en un informe, que reúne las estadísticas de las ciudades capitales, un incremento en este tipo de conflictos, con un aumento del 15 % de casos con agresiones.
Tan solo en los dos primeros meses de este año, en Colombia se registraron 13.346 casos de este tipo de conductas violentas, 1.778 reportes más que en ese mismo período de 2022.
Vale recordar que este panorama de lesiones personales señalado por Medicina Legal tiene otro indicador aparte para medir las agresiones intrafamiliares y violencia de pareja, por lo que se habla de un indicador de violencia entre ciudadanos que, en promedio, durante el 2022 fue de 4,4 casos diarios en Bucaramanga. Si se toman como referencia los datos preliminares de este año para la capital santandereana, ese indicador bordearía los cinco casos por día que llegan a ser evaluados por ese instituto nacional.
Si bien las estadísticas acumuladas en el ámbito nacional reflejan un incremento, esta situación vista a nivel local tiene un crecimiento mayor en los dos primeros meses de este año.
En Bucaramanga, el aumento de los casos de violencia interpersonal frente a los dos primeros meses del año pasado corresponde al 48,9 %. Un panorama que advierte la grave situación de convivencia entre los habitantes de la ciudad.
Aunque, al revisar el histórico de los últimos seis años, se advierte que estos primeros meses han tenido cifras mayores en años como 2018 (364), 2019 (318) y 2020 (324).
Las cifras de la Alcaldía
El secretario del Interior de la Alcaldía de Bucaramanga, general (r) Manuel Antonio Vásquez Prada, señaló que desde el año pasado el reporte que se tiene por parte de la Policía Nacional es una reducción de los casos de lesiones personales que son atendidos por dicha institución en los dos primeros meses de este año.
En esas cuentas, advierte el funcionario, para los primeros dos meses de este 2023 hay una reducción del “11 % en los casos de lesiones personales”, frente al mismo período acumulado de 2022.
En su explicación, el funcionario aseguró que este es un problema estructural y que uno de los puntos que incide, en cierta medida, en las cifras de intolerancia y agresiones entre ciudadanos es el consumo de sustancias psicoactivas, “sumada a disputas por el tráfico de las mismas, teniendo en cuenta que es un negocio lucrativo, desde las economías ilegales”.
Frente a los casos que se presentan a diario en Bucaramanga, el secretario Vásquez Prada señaló que desde la administración municipal se trabaja de manera articulada con diferentes programas e instituciones para lograr la prevención y el esclarecimiento de hechos de intolerancia en diferentes espacios de las comunas y corregimientos de la ciudad.
“Se pierde la confianza”
Sobre esta situación de intolerancia y agresiones entre ciudadanos, la directora del programa Bucaramanga Metropolitana Cómo Vamos, Johanna Cárdenas Acevedo, manifestó que hay varios puntos que deben ser tenidos en cuenta a la hora de referirse a esta situación.
En palabras de la directora Cárdenas Acevedo se ha evidenciado, durante los Encuentros Ciudadanos realizados por ese programa, la falta de confianza que existe entre los habitantes de Bucaramanga como una constante y que esa situación se evidencia también en otros factores.
“Parte de lo que hemos encontrado es que el relacionamiento entre ciudadanos está dado en términos generales por la falta de confianza entre las personas de su entorno y con las instituciones que representan sus intereses”, explicó la directora.
¿Qué se podría hacer?
Ante ese diagnóstico, la directora del programa Bucaramanga Metropolitana Cómo Vamos, Johanna Cárdenas Acevedo, considera que es necesario generar espacios que permitan la integración de la comunidad para frenar esta situación.
“Parte de lo que debería implementarse para fortalecer esos lazos entre ciudadanos es abrir escenarios de diálogo colectivo, eventos comunitarios organizados por los habitantes de los barrios; programas de voluntariado que promuevan acciones transformadoras por la ciudad y faciliten la cooperación entre las personas”, dijo Cárdenas Acevedo.
La experta agregó que hay un espacio para que la academia e investigadores puedan aportar y descifrar, mediante estudios, cuáles son las razones que ubican a la capital santandereana con tasas de lesiones personales por encima del promedio nacional.
“Afirmar las causas de esta situación requiere estudios que con evidencia determinen sus detonantes. La invitación es a que la Academia profundice en este tipo de indicadores y a través de un análisis riguroso pueda ofrecer respuestas a los tomadores de decisión que guíen de manera precisa las acciones para disminuir este fenómeno”, precisó Cárdenas Acevedo.
