Colombia consiguió este domingo su pase a las clasificatorias de marzo de la Copa Davis con el triunfo de la Juan Sebastián Cabal y Robert Farah por 6-2 y 6-2 ante Ergi Kirkin y Cem Ilkel, pues esta victoria supuso el 3-0 en la serie del Grupo Mundial I.
En menos de una hora, la pareja cafetera ratificó su favoritismo y se impuso a una dupla que evidenció que el juego de dobles no es su fuerte.
Igualmente los colombianos revalidaron el buen momento que viven y que se vio en el Abierto de Estados Unidos, en el que cayeron en semifinales hace 10 días con Rajeev Ram y Joe Salisbury.
Así ganaron
En la cancha de tierra batida del Carmel Club de Bogotá, Farah y Cabal empezaron a dominar el partido desde el primer juego, en el que quebraron el saque de sus rivales y mantuvieron una senda triunfante hasta llegar al 6-2 definitivo.
En la segunda manga, la superioridad de los cafeteros mermó, pues los turcos lograron, incluso, quebrar su primer saque cuando el marcador iba 4-1.
Sin embargo, la dupla colombiana volvió a quebrar y terminó sellando su victoria con otro 6-2 contundente, que ratificó además su triunfo en la serie y el paso a las clasificatorias de marzo.
Triunfos del sábado
Las victorias del santandereano Daniel Galán y Nicolás Mejía dieron el sábado los primeros dos puntos a Colombia.
Galán, primera raqueta del país y 75 del ránking de la ATP, se impuso por 6-2 y 6-1 a Cem Ilkel, 365 del mundo.
El anfitrión sometió sin mayores dificultades a su rival en un terreno mojado por la lluvia que cayó en la capital colombiana y ratificó el buen momento que vive, que lo llevó además a principios de mes a tercera ronda del Abierto de Estados Unidos tras vencer a Stéfanos Tsisipas.
A primera hora, en el reñido partido que abrió la serie, Nicolás Mejía venció por 6-3, 1-6 y 7-6 a Altug Celikbelik, la primera raqueta turca.
En cerca de dos horas y media, Mejía, 280 del mundo, logró sacar adelante el encuentro ante un rival que arrancó mal, pero lo apisonó en el segundo set.
En la manga final, que se definió en el tie break, el colombiano logró quebrar el saque de su rival y llevarse la clave victoria.
Los partidos se disputaron en canchas de tierra batida, superficie a la que están más adaptados los jugadores colombianos que también quieren sacar provecho de la altitud de Bogotá en donde la pelota vuela más rápido.