Este miércoles 17 de agosto se conoció que el niño de 12 años que se disparó en la cabeza, porque al parecer era víctima de bullying en el colegio, falleció.
El menor habría usado un arma que era de su papá, miembro retirado de la Policía Nacional. Se encontraba en la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Kennedy, en Bogotá.
De acuerdo con Noticias Caracol, el pequeño les habría dicho a sus amigos del colegio que quería acabar con su vida porque, al parecer, era víctima de matoneo escolar.
Los vecinos del niño habían hecho una cadena de oración y colocado veladoras frente a su casa esperando un milagro, pero desafortunadamente no se dio.
Por ahora, las autoridades adelanta la investigación para determinar cómo sucedieron los hechos que se presentaron en el barrio Roma de Bogotá.