Un aberrante caso de maltrato animal se habría registrado en Piedecuesta.
De acuerdo con la animalista, Alejandra Prada, en el conjunto residencial Junín del municipio, algunos residentes habrían arrancado una persecución contra una familia de zarigüeyas que deambulaba en los árboles de la zona, con el argumento de que eran «animales muy feos».
Según el relato de la animalista, «algunos residentes del conjunto que habrían observado a la mamá zarigüeya y sus bebés expresaron que tocaba matar a ese animal. De repente, se habría notado la ausencia del animal y al preguntarle a uno de los vigilantes dijo que la había encontrado muerta, que al parecer, le habrían dado comida con veneno».
Prada agregó que «los bebés se encuentran extraviados y, según información de la comunidad, son cerca de cuatro crías las que habrían quedado huérfanas».
Por su parte, Rafael Herrera, integrante del Cuerpo de Bomberos de Piedecuesta, manifestó que «recibimos la información el pasado lunes y fuimos a verificar si allí se encontraban los bebés de la zarigüeya pero no los pudimos hallar».
Herrera sostuvo que «vamos a continuar en la búsqueda para poder rescatar a los animales y trasladarlos a un hábitat seguro».
Esta redacción conoció que la Fundación Soy Animal prepara un operativo de rescate nocturno con tramperas para salvar a los animales, ya que se presume que en uno lotes baldíos cercanos al conjunto residencial habría más presencia de estos animales.
De acuerdo con la Policía Metropolitana de Bucaramanga, «esta especie se encuentra en vía de extinción debido a la caza indiscriminada y su ilegal comercialización por traficantes de fauna, algunas de las mayores amenazas a las que se enfrenta, son la expansión de urbanizaciones y la infraestructura vial y el crecimiento de la población humana».
