De acuerdo con lo detallado por las autoridades, la organización criminal que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres también sería responsable de vender estupefacientes; la mayoría de las víctimas también son oriundas de Colombia.
La red, que era liderada por una mujer en compañía de su pareja y varios familiares, operaba en apartamentos de localidades de la provincia de Sevilla donde, al parecer, ofrecían los servicios sexuales de mujeres quienes eran captadas en sus países de origen para luego ser trasladadas hasta España como turistas para que ejercieran la prostitución.
En el marco del operativo realizados por la Policía de España, 23 mujeres fueron liberadas luego de que fueron encontradas en apartamentos donde, presuntamente, estas tenían que compartir habitación con cerca de 12 personas más bajo «pésimas» condiciones de salubridad.
Las víctimas, quienes tenían deudas de unos 8.000 euros cada una con la red, al parecer, también eran obligadas a consumir estupefacientes para así aumentar su tiempo de exposición a las actividades sexuales, indicó un comunicado de las autoridades españolas.
Según explicó la Policía, la jefa de la organización sería una mujer de 54 años de edad, quien no solo sufragaba los gastos del viaje de las mujeres que eran reclutadas para vincularlas a las actividades sexuales, sino que además, lideraba la venta de cocaína a los clientes.
