En un alejado y solitario paraje, Maximiliano Umaña Caballero, de 54 años, habría decidido ponerle fin a su existencia. Lo hallaron ayer a las 7:00 de la mañana, suspendido de un árbol en la vereda Barroblanco de Piedecuesta. Fue escabroso.
Quizá ni testigos hubo, porque donde quedó es una zona poco transitada. Quien lo encontró puso en alerta a las autoridades. No se atrevió a tocarlo. Se sintió más bien angustiado.
A Maximiano acostumbraban a verlo entre las fincas de varios sectores rurales del municipio ‘garrotero’ realizando trabajos de agricultura. No se había mostrado perturbado, tampoco habría manifestado intenciones suicidas. Nadie sabía las ideas que pasaban por su cabeza. Se presume que su deceso se dio a las 5:00 de la mañana.
Umaña Caballero vestía camiseta negra y jean, estaba descalzo y con barro en los pies. La inspección estuvo a cargo de la Sijin y ayer su cuerpo permanecía en Medicina Legal para ser entregado a sus familiares.
