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Una bala perdida terminó con la vida de Melvin Yesid en Villas de Girardot

Una bala ‘perdida’ encontró en el camino a Melvin Yesid Jaime Páez, de 32 años, quien pasadas las 11:00 de la noche se movilizaba en su motocicleta llevando a un familiar hasta un tomadero.

Cuando llegaban fue alcanzado por un proyectil que buscaba con ansias la muerte de alguien, en un intenso tiroteo donde Jaime nada tenía que ver.

Jorge Luis Tovar Tovar, de 21 años, era el objetivo de un sujeto -de nacionalidad venezolana, según dijeron testigos-, quien lo perseguía disparándole.

Jorge estaba en el mismo antro de aquel sujeto a quien -dicen las autoridades- no conocía y quien sin razón aparente lo empezó a mirar mal, incitándolo a problemas.

Tovar le sostuvo la mirada pero cuando el aquel ‘malacaroso’ desenfundó el ‘fierro’ que llevaba y se lo mostró, supo que debía correr por su vida.

Aunque corrió como pudo, el pistolero lo siguió  disparando a diestra y siniestra. Cuatro tiros dejaron a Tovar en el suelo, malherido. El pistolero lo creyó muerto y huyó, pero de aquella “lluvia” de balas que desató, una ojiva le atravesó el corazón a Melvin.  

Ambos fueron trasladados al Hospital Universitario de Santander, pero Melvin Yesid no sobrevivió.

Jorge Tovar recibió dos balazos en la pierna derecha, uno en la pierna izquierda y  otro en el brazo derecho; pero sobrevivió. Se encuentra estable, confirmaron las autoridades.

Tremenda reyerta…

Luego hubo caos en el asentamiento cuando llegó la Policía, pues la recibieron a tiros y pedradas, hasta que lograron la captura del presunto asesino.

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