El 19 de enero de 2022, Anna Uskova, una madre de dos hijos de 40 años, saltó a un agujero de hielo en el río Oredezh congelado cerca de Vyra, un pueblo al sur de San Petersburgo, Rusia, para celebrar la Epifanía ortodoxa.
Pero por desgracia, la mujer fue arrastrada por una fuerte corriente que se movía a unos tres metros por segundo. A pesar de los intentos de su esposo por salvarla, sus esfuerzos fueron en vano. El incidente, capturado en video, generó gran atención en las redes sociales y su cuerpo fue recuperado días después.
Las imágenes de este trágico suceso de nuevo se han viralizado en redes sociales, donde se aprecia a la mujer saltando a un pozo de hielo cortado en un río de Rusia y es arrastrada por una poderosa corriente mientras su esposo intenta rescatarla sin éxito en medio del llanto de sus hijos que presenciaron la terrible escena.
Por qué los rusos saltan a pozos y ríos para celebrar la Epifanía ortodoxa
Al saltar al agua en una suerte de pozos congelados conmemoran el bautismo de Jesús en el río Jordán. Los cristianos ortodoxos de Rusia creen que esta ceremonia anual tiene poderes curativos y que el agua está bendita.
Según el diario “The Moscow Times”, la tradición marca que el agua se vuelve sagrada en este día, y quienes se sumerjan tres veces limpiarán sus pecados.
Sin embargo, el diario indicó que aunque la Iglesia ortodoxa rusa es escéptica en cuanto al valor religioso de estos baños invernales, lo cierto es que la costumbre ha ido ganando adeptos desde los años 80. Y ya no solo gente de fe practica este ritual en Rusia.