Braihan Alexander Marín Parra, un hombre de 29 años con discapacidad auditiva y del habla, fue capturado en un hotel de la zona occidental de Medellín por agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación.
La captura se produjo tras una orden judicial emitida en su contra por la desaparición forzada de su pareja sentimental, Paola Andrea García, una mujer de 41 años, con quien compartía domicilio en el corregimiento San Antonio de Prado.
Según la investigación adelantada por una fiscal especializada de Medellín, la mujer fue vista por última vez el 10 de noviembre de 2022 en su residencia, donde vivía con Marín Parra. Ante la desaparición, la Fiscalía activó el Mecanismo de Búsqueda Urgente (MBU), una estrategia que se implementa para encontrar a personas desaparecidas en situaciones críticas.
La captura se realizó con el apoyo de un intérprete de lengua de señas colombiana, dado que tanto el detenido como la víctima compartían esta misma discapacidad.
A lo largo de la investigación, se evidenció que Marín Parra ofreció múltiples versiones a amigos y vecinos sobre el paradero de la víctima, con el aparente propósito de desviar la atención de las autoridades.
Inicialmente, aseguró que su pareja había fallecido y que él mismo se había encargado de sepultarla; luego afirmó que la mujer había sufrido un accidente de tránsito y que estaba hospitalizada; finalmente, mencionó que ella estaba de paseo en una finca.
Sin embargo, tras más de un año de búsqueda, el 21 de octubre de 2023, y gracias a la información proporcionada por el propio detenido, un equipo de criminalística del CTI localizó el cuerpo de la víctima en una zona montañosa del corregimiento San Antonio de Prado. El cadáver fue trasladado a las instalaciones del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, donde se confirmó su identidad y posteriormente se entregó a sus familiares para las exequias.
Una vez validado el preacuerdo entre la defensa del procesado y la Fiscalía, un juez de conocimiento de Medellín condenó a Braihan Alexander Marín Parra a una pena de 17 años y 1 mes de prisión por su presunta responsabilidad en el crimen.