La Dirección de Tránsito de Bucaramanga, DTB, dio a conocer un grave hecho de irresponsabilidad al volante protagonizado por el conductor de una ambulancia que fue sorprendido en estado de embriaguez.
El caso se presentó en medio de controles efectuados el pasado fin de semana por agentes de Tránsito Municipal que requirieron el vehículo médico.
“La persona que la conducía iba en estado de excitación que al ser confrontado por nuestros experimentados agentes y tras practicarle la prueba de alcoholemia, esta arrojó el grado máximo, es decir nivel 3″, dio a conocer Carlos Enrique Bueno, director de Tránsito Bucaramanga.
Esta persona, según las autoridades, contrario de aceptar la infracción, intentó evadir la responsabilidad y se dio a la fuga.
“Gracias al apoyo de la Policía Nacional fue interceptado cerca al Centro Comercial Megamall en donde pudimos levantar y hacer oficial todo el procedimiento”, añadió el funcionario.
Al conductor se le impuso una multa superior a los 30 millones de pesos y se le aplicó la suspensión de la licencia por 10 años. También el vehículo fue inmovilizado.
“Sorprendentemente, esta ambulancia estaba en condición de entrega provisional tras un accidente anterior. Detectamos que este vehículo ya había sido reportado por alguna situación anormal”, concluyó Carlos Bueno.
No es la primera vez
En enero de este año, la Dirección de Tránsito de Bucaramanga ya había sorprendido a otro conductor de una ambulancia en estado de alicoramiento.
Aquella vez, el hecho se conoció cuando un vehículo de asistencia médica se subió a un andén, en plena la carrera 27 con calle 36, y por poco arrolla a un peatón. Al ser requerido, se pudo encontrar que esta persona iba bajo los efectos del alcohol.
El llamado reiterado de las autoridades es a respetar las normas de tránsito, no conducir en estado de embriaguez y mucho menos si se presta un servicio público o prioritario, como una ambulancia.