Destrozada y con el alma hecha añicos se encuentra hoy Angélica Soler, la madre de David Estiven Fernández Soler, quien se hizo conocido por ser un líder social de las juventudes en la localidad de Kennedy. Hace apenas tres días se supo de su muerte mientras estaba en las montañas del Caquetá. Desde aquel sábado 26 de noviembre de 2022, David fue víctima de reclutamiento forzado por parte de las disidencias del Estado Mayor Central (EMC).
Q’HUBO habló con la madre de ‘Coco’, como cariñosamente le decían a David, y esta valiente mujer nos relató los hechos que llevaron a que su hijo fuera víctima de estos criminales que terminaron arrebatándole la vida, luego de haber militado durante 613 días en las filas de esta organización criminal contra su voluntad.
Ahora, la madre de este joven solo espera poder tener el cadáver de su hijo junto a ella para ponerle punto final a esta traumática pesadilla.
¿Cómo se conoció la muerte de ‘Coco’?
El pasado sábado 27 de julio, mediante un video, el cabecilla del EMC, ‘Iván Mosdisco’, dio a conocer la muerte de David Estiven.
“Un hecho aberrante que nos lleva a calificar como fraccionalista y traidor a este grupo descompuesto, son las acciones sin autorizaciones del Estado Mayor Central del desplazamiento y homicidios de firmantes del acuerdo de paz a los que no consideramos enemigos. Así como el homicidio ordenado por ‘Calarcá’ del joven David Estiven Fernández Soler, integrante de la Primera Línea, que buscó a la organización para refugiarse de la represión paramilitar y que hicieron pasar como desertor para asesinarlo”, informó ‘Iván Mordisco’.
¿Quién era David Estiven Fernández?
“Mi hijo era el mayor de tres hermanos, de una familia de cinco integrantes. Desde que estaba en mi vientre se hacía escuchar. En casa de los tíos, en el campo, en la iglesia (porque mi hijo fue acólito), siempre se hacía escuchar. Desde muy pequeño siempre le gustó abanderar las luchas de los muchachos y buscaba la igualdad para su comunidad y todos los jóvenes. Tenía tantas ganas de ayudar, que se fue a prestar servicio militar y luego volvió a casa, en el barrio El Amparo de Kennedy. Ya mayor, empezó a hacer sus cosas y era muy dedicado con su trabajo social por la comunidad. Era un muchacho sonriente que nunca buscaba problemas; al contrario, trabajaba para ayudar a su comunidad y siempre pensaba en cómo ayudar a sus hermanitos y a nuestra familia”, relató a Q’HUBO Angélica Soler.
David, que hoy tendría 25 años, estudió en el colegio Inem, en la misma localidad donde vivió con su familia. Hizo parte de la Primera Línea y fue raptado por las disidencias del EMCpara ser obligado a empuñar un fusil en las inhóspitas selvas de Colombia.
Cómo se dio a conocer David Estiven
“Voy a luchar hasta que haya una Colombia donde todos podamos caber, donde podamos construir desde las diferencias, porque es fundamental construir un país desde las diferencias. No porque alguien piense diferente, lo voy a desaparecer”, fueron las palabras casi premonitorias de David Estiven en una charla con sus compañeros de la ‘Primera Línea’, en la que militó durante el estallido social de 2021.
“Cuando ‘Coco’ estaba en la Primera Línea, era un profesor para nosotros. Nos enseñaba muchas cosas, apoyaba a los muchachos para que supieran por qué estaban allí y se preocupaba por todos, especialmente por si comían. Así fue como empezó a liderar las ollas comunitarias”, relató un amigo de ‘Coco’.
Después, David, apoyado por el movimiento ‘Raíces Techotiva’, ganó una elección popular, en la que fue elegido como Consejero de Juventud de la localidad de Kennedy. Este hecho le dio más relevancia entre la opinión pública y lo puso en la mira del Pacto Histórico, con el cual empezó a trabajar de la mano con sus máximos dirigentes.
‘Coco’ y su trabajo con el Pacto Histórico
“A mi hijo siempre le gustaba ayudar a la gente, así fue como terminó trabajando en la campaña del actual presidente. No sé cómo hizo para entrar, porque él era muy independiente. Se pasó los primeros seis meses de campaña viajando por todo el país”, recordó la madre de ‘Coco’.
Cuenta la madre del joven que a veces ni podía ver a su hijo por los compromisos que él tenía con la campaña de Gustavo Petro. “Después de que mi hijo se desapareció, ninguno de los que se tomaron fotos con David aparecieron para ayudarnos a dar con el paradero de mi hijo”, reiteró.
Las últimas horas de ‘Coco’ junto a su familia y amigos
“Mi hijo se desapareció un sábado. Estaba trabajando esos días en una universidad. El último día que lo vimos fue el sábado 25 de noviembre de 2022. Comimos en familia y se fue a dormir. Al día siguiente, salí temprano a trabajar y cuando llegué a casa, a las 3:00 p. m., David había dejado el computador prendido, una gaseosa sin terminar y las llaves de la habitación pegadas. Nos pareció raro porque no se llevó sino su celular, ni siquiera sus papeles. Ese día iba a ir a cine con sus hermanos, pero dejó las boletas. Por eso sabemos que se fue contra su voluntad”, agregó la madre de David.
Un amigo cercano del joven relató a Q’HUBO que David soñaba con ser profesor y seguir ayudando a su comunidad.
“Nosotros, entre varios amigos, le compramos el Pin (inscripción) para que se presentara a la Universidad Pedagógica días antes de su desaparición. Por eso estamos seguros de que no se fue por su voluntad, sino porque lo obligaron”, relató un amigo de ‘Coco’.
Exigencias de la familia
“La última y única vez que pude hablar con ‘Coco’ fue el 7 de julio de 2022, cuando se había escapado. Nos dijo que estaba en un pueblito, pero nunca pudo decir dónde. Se notaba angustiado y decía que lo habían obligado a hacer cosas que no quería. Desde ese momento, intenté contactar a Gustavo Petro y a Francia Márquez, ya que ellos trabajaron con mi hijo. Incluso, Gustavo Bolívar un día me llamó y me dijo que nos viéramos, pero eso nunca pasó”, agregó Angélica.
Desde el momento en que se supo de la desaparición de ‘Coco’, los únicos que se preocuparon por su paradero fueron sus familiares, amigos y varios colectivos que alzaron su voz ante la opinión pública buscando que este luchador pudiera encontrarse sano y salvo. Pero luego de un año, ocho meses y cinco días vistiendo el camuflado que, según su familia, lo obligaron a portar, la fatídica noticia de su muerte llegó hasta la humilde casa que habitaba el joven.
“Una amiga me llamó el pasado miércoles a contarme que en un video dijeron que mataron a mi hijo, pero mi amor de madre me dice que lo mataron apenas se supo que se voló, hace más de un año. Solo espero que me puedan entregar el cuerpo de mi hijo. No quiero nada más que el Estado y los que lo tienen me lo entreguen, porque no espero nada más de nadie. Quiero darle un entierro digno y terminar con este sufrimiento”, concluyó Angélica Soler, madre de David Estiven Fernández Soler.
El próximo domingo se llevará a cabo en el portal de las Américas un plantón en para honrar la memoria de David Estiven Fernández Soler, por parte de varios colectivos, amigos y familiares de este joven que lucho, hasta el último de sus días, por la juventud colombiana.
