En los más de 200 puestos que exhiben una variedad de colores y sabores, resaltan la
calidad de las proteínas que parten desde el tradicional pescado seco para los días sacros hasta el cabro sazonado que no puede faltar en un asado santandereano.
Conseguir la libra de pes cado seco en 25 mil pesos o un pollo entero de más de 2 libras en 20 mil pesos son gustos que sólo se puede dar en esta plaza de mercado. Además, ‘gusticos’ como el chicharrón y la colita de cerdo están a la orden.
Así que la bajada de la Avenida Libertador no sea una excusa para venir a mercar acá.
