Camilo Andrés Sánchez Foris tenía apenas 16 años cuando un hombre, mayor que él, lo asesinó a sangre fría el domingo 1 de septiembre de 2019 en el barrio Villa Estrella, en Cartagena.
En esos días no quedó claro si el ataque contra el adolescente fue premeditado o como consecuencia de una riña al cruzarse por el camino esa noche.
Las dudas se fueron aclarando poco a poco, luego que la Policía Metropolitana capturara a Jarrison Sarmiento Tarrá y un juez de Garantías lo enviara a la Cárcel de Ternera, tras cobijarlo con medida de aseguramiento.
A Sarmiento Tarrá le imputaron el delito de homicidio agravado en adolescente y las primeras investigaciones dejaron entrever que el detenido agredió al menor con arma blanca mientras este se desplazaba cerca de él en compañía de un amigo.
“Al parecer, Sarmiento Tarrá manifestó que ‘quería matar’, por lo que se suscitó una discusión que terminó en agresión y desencadenó en la muerte de la víctima”, resumió aquella vez el ente acusador en torno al crimen de Sánchez Foris.
Condenado
En efecto, la Fiscalía constató con pruebas que el ataque contra el adolescente se produjo en medio de un acto de intolerancia.
Esta semana, cuatro años después del homicidio, y tras avaluar el material probatorio aportado por un fiscal de la Unidad de Vida de la Seccional Bolívar, un juez de conocimiento condenó a 33 años y 3 meses de prisión a Jarrison Sarmiento Tarrá (37 años).
“Los hechos investigados sucedieron el 1 de septiembre de 2019 en el barrio Villa Estrella, de Cartagena, donde el hoy condenado hirió con un arma cortopunzante a la víctima cuando transitaba por el lugar. Producto de las lesiones causadas, el hombre falleció momentos después”, dijo la Fiscalía General de la Nación.
Personas que presenciaron el hecho detuvieron al procesado cuanto intentaba huir y luego lo entregaron a la Policía Metropolitana. En su poder le fue hallada el arma con la cual fue cometido el crimen.
Camilo Andrés vivía en el barrio Nuevo Paraíso y hacia su casa se dirigía cuando se encontró en el camino con el presunto agresor. Fue una cuchillada en el tórax que le afectó el corazón y otros órganos vitales la que lo mató casi en el acto. El crimen ocurrió a un costado de La Cordialidad, frente a Villa Estrella.
Una versión indica que no era la primera vez que el menor y su presunto victimario se veían. En medio de las advertencias que uno y otro se decían, el supuesto agresor sacó un cuchillo y se abalanzó sobre Sánchez Foris, atacándolo en el tórax.
Un testigo relata que Jarrison emprendió la huida mientras la víctima agonizaba el pavimento. Unos 15 minutos después, una ambulancia lo auxilió y trasladó al Hospital Universitario del Caribe, pero en el camino falleció.