Ya han pasado nueve días desde que la vida de un niño de 5 años fue apagada por las feroces mordidas de una jauría de pitbull en zona rural aledaña al sector El Cable, barrio Café Madrid, en el norte de Bucaramanga . Aún los familiares del menor siguen sin respuestas y a la espera de justicia mientras que el dolor por su ausencia se acrecienta con el pasar de los días.
“El dueño de los perros se fue de la finca desde que pasaron los hechos. Llegó con camiones y echó todo el trasteo. A nosotros, aunque lo conocemos de muchos años, nunca nos dio la cara ni nos dijo nada por el daño tan grande que nos causó con esos animales que tenía”, dijo a Q’hubo la abuela del pequeño.
Aunque la Alcaldía de Bucaramanga y la Policía adelantaron durante varios días operativos en la zona para buscar a los cuatro perros que le quitaron la vida al niño, no hubo resultados positivos.
Se cree que los animales fueron sacados de la zona por el mismo dueño.
“Nos dicen que los perros él los sacó en camiones, con el trasteo y los marranos. Él había quedado de entregarlos a la justicia y por lo que sabemos no lo ha hecho”, agregó la mujer.
El brigadier general (r) Manuel Vásquez, secretario del Interior, confirmó que el propietario no cumplió con la entrega de los caninos.
“Inferimos que ya no están en la zona y no hemos tenido contacto con el tenedor (…) Él iba a facilitar la aprehensión de los caninos, no cumplió y desapareció. Esta persona está identificada, se tiene la información y el proceso administrativo por inspección de Policía y judicial en Fiscalía avanza”, dijo el funcionario.
