Los libros y los expertos resaltan la gran importancia que tiene el Teatro Coliseo Peralta en la historia de Bucaramanga. Fue un escenario ícono y clave para el desarrollo artístico y cultural de la capital santandereana.
Este importante recinto, en el que se presentaron cientos de artistas y en el cual se deleitaron miles de bumangueses y santandereanos, lastimosamente se cae a pedazos debido a la falta de mantenimiento preventivo y reparaciones locativas.
Ante la falta de los cuidados respectivos, el pasado domingo colapsó el costado norte de dicha estructura, emergencia que por fortuna no causó daños a terceros ni tampoco lesionados, de acuerdo con el reporte entregado por las autoridades.
La noticia tiene afligidos a un sinnúmero de santandereanos, entre artistas, gestores culturales y ciudadanos del común que alguna vez se deleitaron con las funciones musicales, teatrales y cinematográficas que se presentaron a lo largo de décadas.
A través de un comunicado oficial, el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, Imct, informó que el desplome de la estructura se originó “debido al deterioro que desde hace más de dos décadas venía padeciendo y las condiciones climáticas de los últimos días”.
Conforme con lo precisado por historiadores, a partir de 1893 comenzó a funcionar oficialmente el histórico Teatro Coliseo Peralta, localizado en la esquina de la carrera 12 con calle 41 y en donde también se llevaron a cabo hasta eventos deportivos.
“Este escenario, construido hace 137 años, no recibió obras de mantenimiento y conservación por más de 20 años por parte de sus propietarios”, indicó el Imct.
Con el objetivo de recuperar este emblemático inmueble, que en 1975 fue declarado patrimonio histórico nacional, el Gobierno de Bucaramanga adquirió la propiedad en 2022, la cual pertenecía a la Fundación Club Kiwanis.
Trabajos programados desde hoy
Tras el colapso parcial de la estructura, desde el Gobierno de Bucaramanga se informó que ya avanzan las gestiones necesarias con el fin de llevar a cabo una intervención inicial en el teatro, lo más pronto posible, y así prevenir otro posible desplome del techo o paredes.
“La Secretaría de Infraestructura recomendó realizar acciones de primeros auxilios para evitar cualquier situación de emergencia, razón por la que ya se suscribió el contrato mediante el cual se iniciarán estas labores a partir del próximo martes, 14 de marzo”, precisó el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga.
Luego de épocas doradas que vivió a finales de los siglos 19 y 20, el Teatro Coliseo Peralta enfrenta actualmente uno de sus periodos más duros y desalentadores. A pesar de las dificultades, por más de un siglo varios gestores culturales trataron de mantenerlo ‘a flote’.
El auge de este escenario empezó a partir de 1893. El maestro Libardo Vargas, director de la Corporación Teatro Comos y exdirector del Teatro Coliseo Peralta, recordó que “fue construido al estilo de los teatros corrales españoles y en sus inicios fue el único de este tipo en América Latina”.
Vargas destacó que en dicho entorno “se presentaron las primeras compañías de teatro y en donde se originó, prácticamente, lo que fue el circo en Colombia. Este espacio tiene un gran valor histórico. Fue hasta una pista de patinaje y de baile. Podemos decir que fue el primer club social de Bucaramanga, cuando su población era muy reducida”.
Según este gestor cultural, el teatro fue creado por Luis Emilio Garnica, quien le compró la edificación a Anselmo Peralta, un ciudadano considerado como benefactor de la ciudad, ya que donó varios terrenos a Bucaramanga.
El segundo auge y su decadencia
Con el surgimiento de nuevos teatros y cinemas, desde inicios del siglo 20 el Peralta perdió posicionamiento en la escena artística y cultural de la capital santandereana. Posteriormente, en la década de 1990, se emprendió un nuevo proyecto para recuperar este emblema de la cultura bumanguesa.
“Se logró traer nuevamente a grandes compañías artísticas nacionales e internacionales, y así volvió a ser epicentro de la programación cultural. El teatro se volvió a llenar de público. Pero, justo cuando estaba en un momento dorado, surgieron intereses económicos a costa del nuevo ‘boom’ del teatro, como un valor de arriendo muy difícil de costear”, narró el maestro Vargas, quien administró el Teatro Coliseo Peralta entre los años 1991 y 2000.
La decadencia de uno de los inmuebles más antiguos de Bucaramanga se inició con el nuevo milenio. La oferta de artistas y eventos disminuyó paulatinamente con el paso de los años. Las actividades comenzaron a tener menor asistencia. Su infraestructura se descuidó, a tal punto que los ciudadanos debieron dejar de frecuentar el escenario por su seguridad.
“Es muy triste esta situación. Lo que ocurrió con el teatro demuestra que las artes y la cultura aún no son valoradas lo suficiente tanto por autoridades como por el resto de la sociedad en Bucaramanga. Es un daño irreparable. El año pasado tuvimos que salir del teatro, ante el riesgo inminente de colapso”, manifestó el maestro Jaime Alfonso Lizarazo Bautista, director del grupo Jaulabierta Taller de Teatro.
En los últimos años los artistas locales realizaron múltiples llamados a las autoridades, incluso convocaron marchas, reclamando intervenciones en el histórico teatro.
“Ahora no sabemos cuánto tiempo tenemos que esperar para ver y disfrutar su restauración, tememos que sea mucho. Si la reconstrucción del Teatro Santander duró cerca de diez años, cuánto puede tomar la restauración del Coliseo Peralta, porque su reconstrucción requiere el concepto de expertos en patrimonio”, agregó Lizarazo Bautista.
Por ahora, el Gobierno de Bucaramanga no ha entregado detalles sobre cuándo se iniciarían las obras para la restauración del Teatro Peralta.
De acuerdo con lo precisado por el Imct, “el Ministerio de Cultura se comprometió a realizar los estudios y diseños técnicos para su restauración, los cuales serán financiados en conjunto con la Administración Municipal”.
