Cuando empieza a salir con otra persona no tiene más remedio que convertirse en parte de su familia… Y eso significa que tiene que conocer y dar la bienvenida a toda su familia también.
Pero después de que la etapa de la luna de miel se desvanece, es posible que note que tiene una suegra que no es tan agradable. Incluso podría convertirse en el desafortunado beneficiario o beneficiaria de las microagresiones que luego se transforman en una agresión en toda regla.
Tal vez le diga la manera correcta de ordenar las cosas en casa o se pase de visita al apartamento sin previo aviso.
Quizá insistie en que las mujeres tienen que cocinar a su pareja, muestre signos de celos por su feliz relación o comience a manipular las situaciones para hacerle quedar mal.
Sea lo que sea, estos comportamientos tienden a acumularse con el tiempo hasta que comienzan a afectar su salud y bienestar mental y emocional.
Es por eso que a continuación, la coach Camila Díaz le explica cómo lidiar de manera asertiva con una suegra difícil.
Los consejos
1. Hable con su suegra.
Hágale saber que sabe que no es fácil ver a una nueva persona en su familia, pero sea claro con ejemplos de cosas en las debe haber un límite, como que llame antes de visitarles o respetar las decisiones de la pareja.
Bajo ninguna circunstancia sea irónica o irónico con su suegra aunque ella lo sea. Lo mejor es mantener las buenas maneras y la calma.
2. Planee una actividad para su cónyuge y su madre.
Y que usted no esté incluido o incluida. Tener un descanso de ver a su suegra y a su pareja siempre puede ser lo mejor para evitar que las cosas se pongan más difíciles si ya lo son.
3. Pida a su pareja que ponga límites.
Ese método puede ser difícil de navegar para algunas parejas: no quieren herir los sentimientos de su madre, ni quieren herir a su cónyuge, pero si su suegra está sobrepasando los límites lo más seguro es que no le escuchará a usted, sino a su hijo o hija.
4. Un poco de su propia medicina.
Su suegra le dice la forma correcta de cocinar el pollo, entonces puede sugerirle que los invite a todos a una buena comida la próxima vez que los visite. No lo haga de forma agresiva, simplemente dele un poco de lo suyo sin discutir.
5. Déjela hacer lo suyo.
Si puede soportarlo, simplemente acepte el hecho de que cuando ella les visite va a molestarse o cuestionar la forma en que hace las cosas. En otras palabras, no le preste tanta atención, pero sin ser grosero. Solo deje que sus palabras pasen de largo.
6. Abandone la discusión.
Si las cosas se ponen álgidas, irse es la mejor forma de lidiar con ella. Deje a su pareja y a suegra solos y vaya a dar una vuelta. Puedes verse como algo grosero momentáneamente, pero si ella está en su casa y es autoritaria y ya ha hablado con ella y no ha visto ningún cambio, darse un poco de espacio no es más grosero que ella incomodándole.